Es una tendencia que surgió en el vestir a finales de los años 40 y principios de los 50. No sólo era una moda sino también una actitud. Se caracterizaba fundamentalmente por la sensualidad (una mezcla de picardía a la vez que inocencia).
Para ser una auténtica pin-up tienes que seguir las siguientes reglas:
- Pasión por los escotes: los más utilizados son los que tienen forma de corazón, sin tirantes o con tiras atadas al cuello. Habitualmente dejaban los hombros al aire y de vez en cuando la espalda también.
- Corsé: es una pieza casi clave.
- Estampados: corazones, cuadritos vichy, flores, frutas y puntos.
- Colores: azul, blanco, negro, rojo y tonos pastel.
- Cintura de avispa: anudar las camisas al ombligo y no abrocharlas hasta arriba.
PANTALONES: de talle alto (o cinturoón muy fino), muy cortitos y con bolsillos en los laterales. Y también piratas muy ajustados que lleguen más o menos a la altura del gemelo.
FALDAS: las más utilizadas y sugerentes son las de tubo.
- Uso de ligueros: al no poder prescindir de las medias (muy finas) en color natural o en negro, se hace casi imprescindible además el uso de los ligueros, para ser aún más sexy.
- Calzado: Zapatos de tacón de aguja (principalmente) y el más utilizado aún es el modelo peep-toe (abierto por delante).
- Peinados: Siempre sofisticados. Recogido o suelto pero siempre con la raya al lado y unas ligeras ondas.
- Maquillaje: debe reflejar una tez blanca y luminosa, parte superior del ojo con eyeliner de color negro hasta el final y con un rabito recto, doble máscara de pestañas y rizadas. Y lo más imprescindible, los labios con apariencia jugosa, perfilados y pintados de rojo. Y uñas también rojas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario